La semana pasada hablé de ayuno intermitente y de diferentes maneras de depurar.
Independientemente de cual de ellos elijas o incluso si eliges no depurar o sencillamente tomar algunas plantas sin modificar tu alimentación, es mejor que dejes de comer al menos 3 horas antes de acostarte.
Son muchos los beneficio para tu salud que obtendrás al desarrollar este hábito.
Cuando estas durmiendo, tu energía necesita estar en su punto mas bajo, y aportar un exceso de combustible en ese momento provocará la producción de cantidades excesivas de radicales libres dañinos que aceleran el envejecimiento y contribuyen al desarrollo de enfermedades cardio-vasculares.
El sueño es el tiempo de desintoxicación y reparación de tu cuerpo, y tener que digerir una comida durante este periodo entorpecerá estos importantes procesos.
El exceso de comida cerca de la hora de dormir produce insomnio y pesadillas, esto hará que no descanses bien y te levantes cansado y de mal humor.
Cuando se baja el sol nuestro cuerpo produce melatonina. La melatonina es una hormona de origen pineal cuya función es la regulación de los ritmos circadianos, básicamente nos prepara para dormir.
La producción de melatonina afecta el peristaltismo digestivo y, de consecuencia el transito del bolo alimenticio. Esto se traduce en mayor tiempo de digestión.
La misma comida tardará mas en digerirse después de la puesta del sol que durante el día. Esto es muy importante de tener en cuenta, sobretodo en invierno cuando el sol desaparece pronto es importante cenar muy ligero. Es mejor hacer una buena merienda y cenar muy poquito.